Si bien es grandioso que un hijo a partir de los 4-5 años comience a desear un compañerito animal, dada la cantidad de beneficios que esto pudiera traerle en su desarrollo personal, es necesario que analice un par de aspectos -importantes a concientizar- para entender lo que significa tener una mascota en casa, ya que, aun cuando los hijos puedan ayudar con el cuidado de su mascota, es usted quien llevará la mayor responsabilidad.
Tener una mascota en casa no debe ser cuestión de un capricho
Es necesario que usted como padre sea consciente de los cuidados y atenciones que requiere cualquier animal, de manera que pueda explicarles a sus hijos todo lo que implica llevárselo a casa. Deberá hacerles entender cosas como que no se trata de tenerlo unos días para luego aburrirse, ni son objetos con los que pueden jugar a su antojo y luego desechar, sino que éstos son seres que también deben ser alimentados, cuidados y queridos.
Espacio y tiempo disponible para atender al animal
Antes de adquirir una mascota, es importante estar seguro de que dispone de suficiente espacio para tener una mascota en casa, de tal modo que el animal pueda vivir con comodidad sin causarle molestias a la familia. Igualmente, debe haber estudiado -con antelación- cuánto tiempo pasará el animal en soledad, mientras la familia está fuera de la casa.
Muchas personas piensan que pueden dejar todo el día a su mascota en casa, con la comida servida, hasta que lleguen en la noche. Pues en realidad no es así de sencillo, los animales -al igual que los seres humanos-, tienden a sentirse abandonados, aburridos y deprimidos si se les deja mucho tiempo a solas; lo que puede traer consecuencias tanto en la salud de éste, como en las instalaciones de su hogar.
La decisión de adquirir una mascota debe ser previamente analizada y discutida en familia, tomando en consideración toda la responsabilidad que el hecho amerita. No debemos jamás olvidar, que todo ser vivo merece cuidados y atención.
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