Los gatos, aunque mascotas adorables, son también animales que cuentan con muchos detractores. Y es que, hay quien piensa que un gato es un animal sucio, agresivo, arisco, y fuente de enfermedades. Especialmente los gatos callejeros, se ganan la animadversión de quienes, equivocadamente, denuncian que una calle un gatos es una calle sucia y foco de infecciones. Hay que recordar, sin embargo, que no son los gatos quienes ensucian, sino la gente.
El caos de un mundo sin gatos
Hay expertos que señalan que, si los gatos desaparecieran, incluso empeoraría la salud de las personas. Y es que acariciar a un lindo gatito, reduce el estrés y nos hace sentirnos más felices.
Pero no únicamente en el sentimentalismo se basa esta teoría, sino que la ausencia de gatos haría aumentar las plagas de ratas y otros animales, y con ello nos quedaríamos sin alimento. Y, además de comerse nuestros granos, las ratas exterminarían los pájaros. Adiós al hermoso vuelo de las aves en el cielo.
Aparte de esto, un mundo sin gatos aumentaría el desempleo. Y es que, al parecer, España es el principal exportador de uno de los componentes de la arena de gato, la sepiolita.
Si echamos un vistazo a internet, encontraremos muchos vídeos divertidos, e imágenes protagonizadas por gatos en pose curiosa.
Así que, ya lo saben, un mundo sin gatos sería un caos. Y no pedimos que te gusten los gatos, simplemente, que respetes su vida y su entorno. Quienes ensucian las calles no son los gatos, sino las personas poco civilizadas.
