3 ideas para ayudar a tu perro a nadar y disfrutar del agua

Aprender a nadar y a sentirse cómodos en el agua es una tarea complicada tanto para humanos como para perros, pero si se logra, se convierte en una de las mayores fuentes de satisfacción y diversión que se pueden vivir en el día a día.

Entorno al mundo canino, existe el falso mito de que todos los perros saben nadar instintivamente, lo que lleva a muchas personas a cometer errores fatales en el primer chapuzón de su amigo de cuatro patas. Motivo por el que es importante para la persona profundizar en el arte de la natación canina y así asegurarse de brindarle uno de los mejores momentos de su vida a su compañero; Pero ¿cómo? Conociendo las 3 ideas para ayudar a tu perro a nadar y disfrutar del agua.

Todo aprendizaje lleva un proceso

El error principal y el más común al momento de enseñar a nadar a un perro es apresurar las cosas, el no darle tiempo al can ni importancia al paso a paso que este necesita para sentirse seguro en el agua. Esto es algo que aplica incluso para las razas que sí tienen un instinto natural para el nado, como lo son los Terranova, Labrador Retriever, Golden Retriever y los perros de agua español.

Para iniciar apropiadamente la interacción perro-agua, hay que empezar acostumbrándolo a tener contacto con esta, siempre en lugares pocos profundos. Para esto se suelen utilizar piscinas para niños o bañeras, e incluso orillas de playas con poco oleaje. En el proceso siempre es importante hacerle sentir al perro que él tiene el control, y que cuando quiera irse podrá hacerlo.

Compañía humana y canina

No hay forma más efectiva de hacer sentir a un perro seguro cerca del agua que estando junto a su humano favorito, y de ser posible, también junto a sus mejores amigos perrunos. La presencia de su dueño a su lado es un gran alivio emocional para el can, pero por sobre todo, la actitud y energía que emite la persona influye directamente en los ánimos del perro.

Si su humano le transmite seguridad y alegría respecto al agua, el perro tendrá mayores motivos para intentar acercarse a ella. Pero otra de las razones por la que la presencia humana es tan importante, es porque a medida que el perro vaya realizando avances para aprender a nadar, el refuerzo positivo dado por su humano, a través de caricias y premios, fortalecerá la confianza del can en el agua.

Artilugios para hacerlo divertido y seguro

Un elemento que nunca puede faltar al enseñar a un perro a nadar, en especial si se trata de una raza con complicaciones morfológicas como los bulldog, pugs o perros salchicha, es el chaleco salvavidas. Esta herramienta es de suma vitalidad también cuando se lleva a un can a la playa, ríos o lagos, independientemente de su raza.

Además del chaleco salvavidas, los juguetes tienen un rol fundamental para lograr que el perro se sienta cómodo y disfrute del agua. Los juguetes para lanzar, siempre a una distancia segura, o peluches son los más comunes, aunque estos deben ser de materiales resistentes al agua para evitar daños.

El otro elemento imprescindible para el can y su salud es tener a su disposición un envase con agua dulce y fresca, ¡el agua para beber nunca debe faltar!

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