¿De qué se alimentan las iguanas?

La belleza y singular apariencia de las iguanas, que recuerda a la imagen que se tiene de los dinosaurios, ha causado que estas tengan una creciente popularidad en el mundo de las mascotas. Como mascotas reptiles, su presencia es cada vez más común en los hogares, pero no siempre de la manera debida.

Debido a la desinformación y a que no son animales fáciles de cuidar, muchas de ellas carecen de un lugar apropiado donde estar y de una dieta balanceada que les permita vivir sanamente; desencadenando en la gran mayoría de casos problemas de salud relacionados principalmente con la enfermedad metabólica ósea, una de las complicaciones de salud más comunes en iguanas.

Para brindarle a la iguana el cuidado que merece y así asegurar su bienestar, la persona a cargo debe cumplir con una serie de elementos vitales para la vida del animal, empezando por la comida. Así que, ¿de qué se alimentan las iguanas?

 

Alimentación de las iguanas

Las iguanas son animales herbívoros, que entran en las clasificaciones de frugívoros y folívoros, es decir, que su dieta se compone esencialmente de plantas, hojas, malezas, flores, frutas y vegetales. Algunos ejemplares jóvenes y subespecies como la iguana negra, comen en estado salvaje insectos y otros componentes de origen animal, sin embargo, esto ocurre muy rara vez y como una forma de encontrar nutrientes cuando hay escasez de su dieta normal.

La alimentación de una iguana en cautiverio debe parecerse lo más posible a su dieta natural, asegurándose de que siempre exista variedad en lo que se le dé y que cumpla con sus necesidades nutricionales. Los alimentos que se le den no deben estar contaminados o tener químicos, pues esto puede afectar gravemente al reptil.

En la alimentación de la iguana, las verduras y las hojas deben ser el elemento principal, mientras que las frutas deben formar solo un 10-15% de su dieta, por su lado, los piensos especiales para iguanas, los granos y cereales como el arroz deben tener una presencia del 5% o menos. Es importante recalcar que algunas frutas, vegetales u hojas solo pueden ser dados de forma ocasional, una o dos veces por semana y no en grandes cantidades, como es el caso de las espinacas, las lechugas y la coliflor.

En la alimentación se incluyen principalmente la alfalfa, acelgas, escaloras, el calabacín, cilantro, tomates, manzanas, papaya, calabaza, pera, quingombó, chirivía, melón e higo. Además de poderse añadir a su dieta de forma esporádica la zanahoria, el berro, lechuga romana, sandía y brotes de soja. Entre las plantas, flores y malezas que se le pueden dar se destacan el diente de león, la alfalfa, ribwort, berro amargo, tréboles, malva y mostaza de cobertura.

Las flores utilizadas para alimentar iguanas más comunes son la hibisco, la rosa, capuchina, dalia, lila, boca de dragón, flor de manzana, lavanda y la crisantemo. Entre las hojas y malezas, siempre que no estén contaminadas, se encuentran las ortigas, las hojas de abedul, hojas de haya, hojas de avellana, hawkbit, pamplina, sowthistle y las enredaderas.

 

¿Qué alimentos no deben dárseles a las iguanas?

La dieta de las iguanas debe ser estrictamente herbívora de ser posible, por lo que alimentos de origen animal, incluidos los insectos y pescados, no están permitidos. Esto se debe principalmente a que las iguanas no son capaces de digerir la carne, y el esfuerzo que debe hacer el organismo para pasarla puede dejar daños permanentes en los órganos del animal. Aparte de esto, las frutas cítricas como las naranjas y el kiwi, los guisantes con vaina, ajo, cebolla y las judías, deben evitarse. El ruibarbo es altamente tóxico para ellas y no debe dárseles bajo ningún circunstancia.

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