Hemos soportado durante días los berridos de nuestra gata en estado de celo y, ahora, resulta que sus llamadas amorosas hicieron efecto ante algún galán gatuno. Los resultados ya los tenemos aquí: nuestra gata está preñada, esperamos la llegada de gatitos.
Lo que debes saber
La gestación de la gata dura entre 60 y 65 días. Es el período que pasa entre que el macho la cubre hasta que se produce el parto. La fecundación se produce después de las 24 a 36 horas desde la cópula, por lo que es frecuente, en gatas promíscuas, que cada uno de sus gatitos sea de diferente padre. Entre las 3 y las 4 semanas de gestación comienzan a desarrollársele las mamas, los pezones se vuelven más rosados y pierden pelo del vientre. A las 5 semanas podemos palpar pequeños bultos en su barriguita, son los gatitos. Y a partir de la sexta semana, nuestra gata ya presenta la panza redonda. En un período de entre 60 y máximo de 72 días, llegarán al mundo las crías. El momento del parto es impredecible.
Cuidados en la espera
Al principio, alimentaremos a la gata dos veces al día y aumentaremos hasta cuatro en las últimas semanas. Conviene también mezclarles con su alimento pienso para babys. Recortarles el pelo de alrededor de los pezones la ayudará a alimentar a las crías. Una caja de cartón con almohada o sábanas le servirá de madriguera para el parto. Si ves que la gata está débil, o no come o bebe durante días, llévala al veterinario.
